Día de la Luz.
Una fiesta de carácter religioso y fervor para los habitantes de la localidad y visitantes, que comienza a primera hora de la mañana del lunes de Pascua con una solemne procesión desde la Iglesia parroquial de la Asunción hasta la Plaza de San Sebastián. Recorrido al que se suman carrozas y caballerías que acompañan a la virgen hasta su ermita. A partir de las 12 de la mañana son las famosas carreras de caballos. Asistentes que jadean la pericia de los jinetes, ataviados con trajes vistosos; y el brío de los caballos. En estas carreras, jinetes individuales o en parejas corren a gran velocidad entre las miles de personas que asisten entusiasmas al evento.
Tras las carreras, en torno a las dos de la tarde se realiza la procesión de regreso de la patrona, desde la plaza de San Sebastián hasta la parroquia de la Asunción. Una imagen que estará acompañada por los jinetes y caballos que anteriormente participaron en las carreras del Día de Luz.
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